Para mi, esta temporada del 2017 fue una probadita de lo que será este deporte sin mi favorito y sin el Big Four. No será lo mismo, sin embargo, a todo se acostumbra uno, menos a no comer. Así que me buscaré un nuevo favorito (que posiblemente sea Dominique Thiem) y seguiremos disfrutando del mejor y más bello deporte del mundo.
En 7 días el 12 de noviembre comenzará el último torneo del año, que se llama World Tour Finals. En él juegan los ocho mejores jugadores del mundo y esto se determina de acuerdo a la cantidad de puntos de ranking que se hayan acumulado en este año. Esta edición estará llena de nuevas caras y figuras de bajo perfil, no quiero ofender a nadie, pero así es.

Los participantes son: Roger Federer, Rafael Nadal (dudoso, al parecer también se retirará del Torneo), Marin Cilic, Grigor Dimitrov, Jack Sock (quien acaba de ganar el Abierto de París, increíble pero cierto), Alexander Zverev, Dominique Thiem y David Goffin. De retirarse Nadal, quedaría Pablo Carreño Busta en su lugar.
Todos estos nombres, incluso para una que sigue el tema, que leo toneladas de artículos y reseñas durante el año, son relativamente nuevos. Zverev y Thiem, son chamacos que han tenido un muy buen año, igual que Goffin. Jack Sock es un milagro producto de las lesiones de los otros jugadores; Cilic y Dimitrov, son los eternos «dama de honor, nunca la novia»
Novak Djokovic acaba de ser papá por segunda vez, en septiembre nació su hija. Andy Murray ha estado trabajando mucho para recuperarse. Jugará un partido a beneficio de diversas obras de caridad, vs Roger Federer, el martes, en Escocia. Se espera que ambos regresen al Tour de la ATP en enero, en Australia. Ojalá y así sea porque ambos hacen mucha falta.
Con el World Tour Finals termina la temporada 2017 del tenis mundial. Una temporada que para mi gusto, es el comienzo del fin de la Era «Big Four». Qué bueno que la disfrutamos mucho, algún día tenía que acabar.