Exactamente el mismo día que Roger Federer, 11 de abril, seis años más tarde, se casó Andy Murray con su eterna novia, Kim Sears. Eso habla de que si quieres tener una boda primaveral, y eres tenista profesional, tiene que ser entre el Abierto de Miami y el Abierto de Monte Carlo.
De los Big Four, ya se casaron tres. Los otros dos, las respectivas novias embarazadísimas. Solo falta Rafa Nadal, quien tiene también una novia eterna, Francisca «Xisca» Perello.

Se hablaba de la maldición de Pete Sampras, quien se casó y a partir de ello comenzó a perder perder perder y quedó bajísimo en el ranking. Ganó un Grand Slam más, y se retiró. Creo que ya no es vigente, ya que tanto Djokovic como Federer, aun casados y con hijos, tienen un excelente ranking: 1 y 2 del mundo, respectivamente. !Muchas felicidades a los recién casados!

